La  vivienda pertenece a un edificio de 1880 en El Barrio del Carmen de Valencia. Nos encontramos con una vivienda de 67 m2 muy alargada, compartimentada y con poca luz natural.

La intervención se inició reforzando la estructura en 3 puntos: 1) forjado superior, de madera en vigas y viguetas, 2) el muro medianero de carga, compuesto de piedras y argamasa, mediante un trasdosado de hormigón anclado al muro de planta baja, y por último, 3) el forjado inferior, limpiando la capa de tierra y mortero para crear una capa de compresión nueva mediante hormigón ligero estructural. Se reconstruyeron los revoltones para integrar en ellos  la iluminación indirecta de toda la vivienda .

La nueva distribución busca dar la mayor amplitud al espacio, creando un loft donde únicamente el baño se encuentra compartimentado. Los diferentes espacios se delimitan con un cambio de pavimento en la cocina, creando una transición entre la zona de día, dando a la fachada principal y la zona de noche, que se ilumina y ventila a través un patio posterior. Como elemento central y articulador existe un pequeño patio de luces que ilumina y ventila las piezas del baño y una zona de estudio.

En la demolición se recuperaron baldosas hidráulicas de la época que se han reutilizado para mantener la esencia, usándose para componer el cabezal de la cama y una hornacina frente a ésta.